«Ambato en Bici y a Pie», una semana después

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Hace una semana, el sábado 20 de febrero de 2021, se puso en marcha el plan piloto de movilidad sostenible “Ambato en Bici y a Pie”. El proyecto incluye una ciclorruta de 2 kilómetros en el centro de Ambato. Como cualquier proyecto que pretende romper esquemas y que la urbe de un salto cualitativo hacia el futuro en cuanto a movilidad sostenible, ha suscitado aplausos y críticas entre la ciudadanía. 

Le invitamos a revisar la transmisión en vivo realizada por Ambato News el día del lanzamiento, en este enlace.

Esta interesante iniciativa es impulsada por la Dirección de Tránsito del Municipio de Ambato y cuenta con el apoyo de la GIZ, agencia de cooperación de Alemania; el Grupo FARO; Y la consultora YES Innovation. El proyecto es financiado en su totalidad por organizaciones internacionales, por lo que el Municipio no tuvo que destinar su presupuesto para implementar este plan piloto que se extenderá hasta el 6 de marzo de 2021. El costo de los estudios de factibilidad fue de USD 80.000. 

Los ciclistas disfrutaron de la ciclorruta en el primer día de su puesta en marcha, el sábado 20 de febrero de 2021. Foto: Karen Morales

La ciclorruta involucra a las calles Bolívar, Eloy Alfaro, Guayaquil y Sucre, en el centro de la capital de Tungurahua. De acuerdo a Carlos Guerrero, director de Tránsito y Movilidad del Municipio, “el proyecto piloto durará 15 días. Luego se retirará todo el mobiliario (jardineras, bolardos amarillos, entre otros) que actualmente están instalados en las calles de Ambato por donde cruza la ciclorruta, que es para uso exclusivo de las personas que utilizan bicicleta para desplazarse de un lugar a otro”, subrayó Guerrero. 

El objetivo es que Ambato se encamine hacia una movilidad sostenible y libre de contaminación, con un carril exclusivo para bicicletas y peatones, indicó el funcionario municipal. También se implementaron islas de seguridad, equipadas con mobiliario urbano. Se ubican en las calles Martínez y Cevallos; Sucre, entre Lalama y Mariano Egüez; y una tercera isla en la intersección de la Sucre y Montalvo. 

Las jardineras temporales forman parte de la «pacificación» que se ejecuta en el centro de Ambato, como parte de este plan piloto. Foto: El Heraldo

¿Cómo surgió la idea?

Según Carlos Guerrero, el proyecto surgió en mayo de 2020, como parte de un plan de movilidad emergente Covid-19, financiado por la GIZ, el Grupo FARO y la consultora YES Innovation. “La idea es que la gente se apodere de estos espacios y los cuide. El ciudadano que estaba acostumbrado a hacer todo en su vehículo está con incomodidades, pero los pilotos fueron socializados a través de diferentes acciones”, añadió.

Según El Comercio, luego de realizar un estudio técnico se determinó que había que buscar alternativas de movilidad segura para los ciudadanos. Por ello se consideró la creación de ciclorrutas y zonas peatonalizadas para la gente. 

Hasta el 6 de marzo, cuando culmine esta etapa piloto, se realizará un análisis sobre la aceptación de la ciclorruta, lo que permitirá replicarla en otros espacios de la ciudad. Se escogió estos sitios por el alto tránsito y concentración de personas. 

¿Qué opina la gente?

Luis Supe es deportista y trabaja en una empresa. El piensa que el circuito es interesante debido a que la urbe no cuenta con una ciclovía y la ciclorruta es una alternativa que debería funcionar en la ciudad. “Ambato debe tener un circuito y este sería el ideal”. 

Otras personas, en redes sociales, dicen que el centro no es para hacer turismo ni pasear, sino para hacer trámites puntuales y que por eso sería inútil el proyecto. Asimismo, hay críticas en torno a que no existen parqueaderos para las bicicletas. Sin embargo, al ser un plan piloto, se espera que si llega a convertirse en permanente, se construyan más facilidades para las bicicletas. También se evidencian críticas respecto al alto tráfico que se genera en las calles por las que atraviesa la ciclorruta, debido a que no son tan anchas.

Según una transeúnte del centro de Ambato, “para nosotros es una forma para despejar el tráfico y para que exista mejor movilidad para ciclistas. Pero como somos un poco mal educados en la forma de conducir es muy duro aceptar estas iniciativas, pero si llevamos con respeto todo llegará a buen término”. 

El Dióxido de Carbono (CO2) que emite cada tipo de transporte contribuye al cambio climático, por lo que iniciativas como ésta, contribuyen a mitigarlo.

Comparativo del impacto en las emisiones de Dióxido de Carbono (CO2) que emite cada tipo de transporte. Este gas contribuye al cambio climático, por lo que iniciativas como ésta, contribuyen a mitigarlo.

Otro peatón dijo que “está muy hermoso para la recreación de toda la juventud y personas de toda edad, apoyo esta iniciativa porque existe mucha contaminación en el centro”. 

Según otra transeúnte “yo le veo súper bien, pues la ciudad está creciendo. Se ven muchas obras y aunque este proyecto del ciclopaseo obstaculiza bastante, todo es hasta acostumbrarse y considero todos tenemos derechos a transitar y las personas que no posean vehículos está bien que se puedan transportar en bicicleta, pienso que está muy bien es una excelente obra”. 

Según Jéssica Rodríguez, el proyecto le parece interesante. “Hay que ver cómo avanza el plan piloto. Existe un poco de tráfico pero hay beneficio para las personas que hacen deporte, entonces hay que ver paso a paso qué consecuencias trae. En principio se ve bueno para la salud. Yo creo que hay más espacios en otros lugares fuera de la ciudad donde sería muy interesante ver ese tipo de proyectos. Lo que tendría que hacer quizás la municipalidad es un plan piloto para los choferes y mejorar la socialización con conductores de autos y buses para que este tipo de proyectos no sea mal visto por la ciudadanía”. 

De acuerdo a Mishell Villacís, “considero que es un buen aporte al medio ambiente, sobre todo porque el casco principal de Ambato se encuentra colapsado por vehículos, por toda la gente que está ahí y estacionan sus autos cerca de los locales comerciales y de las entidades públicas que se encuentran principalmente en el centro. Sin embargo, creo que debe existir una reforma en la cultura y una socialización muy clara para que la gente tenga en cuenta el cómo y porqué del uso de las bicicletas”. 

Según Édgar Zamora, taxista de la cooperativa Terminal Terrestre Ambato, “faltó información por parte del municipio, para que nosotros como taxistas tomemos las medidas necesarias, como optar por otras rutas y así evitar el tráfico que en las horas pico se vuelve insoportable. De ahí las iniciativas son buenas pero deben ser reubicadas en sectores con menos congestión”. 

Por su lado, Lorena Quinata indicó que “el proyecto es bueno para darte cuenta que sí podemos usar otro tipo de transporte y creo que si es que ha causado malestares a las personas es porque no estamos acostumbrados. Si se sigue con el proyecto es cuestión de acostumbrarse, no es algo que no se pueda hacer, es algo que se ha visto que se ha desarrollado en otros países. Claro que no vamos a comparar pero no es algo imposible. El proyecto puede trascender siempre y cuando la gente colabore y se motive más a usar este medio.

Finalmente, Wilson Paucar, taxista de la Coop. Libertadores, mencionó que “este proyecto genera más congestión y tráfico en el centro y eso implica atrasos para los transportistas. Creo que está bien crear ciclovías por salud, pero en lugares con mayor espacio o vías menos concurridas ya que en el centro es muy complicado por el comercio y la informalidad”. 

Soñar con un Ambato sostenible e inclusivo

La ejecución del plan piloto es positivo para Ambato. Por la pandemia han surgido oportunidades para replantear cómo concebimos a nuestras ciudades. Por ello, un proyecto como este es importante que sea socializado y estudiado técnicamente. Es fundamental que las instituciones competentes y que organismos de cooperación y fundaciones apoyen la replicación de estas iniciativas en donde sea factible en la ciudad. 

Hay que tomar en cuenta que la topografía de la capital de Tungurahua es compleja, sin embargo hay barrios en los que se podría replicar esta iniciativa de manera permanente. La pandemia nos obliga a repensar la movilidad, la cultura, el ambiente, el urbanismo y la seguridad. Si planes piloto como “Ambato en Bici y a Pie”, se ejecutan correctamente, la ciudad dará un salto cualitativo al futuro y podrá compararse con ciudades como Medellín o Ámsterdam, donde la movilidad sostenible es la regla. 

Ojalá que los distintos actores involucrados (transportistas, vecinos, comerciantes, operadores turísticos, instituciones públicas y privadas) entiendan la importancia de este tipo de proyectos y contribuyan a su fortalecimiento a mediano y largo plazo. 

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